Playa de las Catedrales
La playa de Las Catedrales es única en Galicia. La intensa erosión ejercida por el mar sobre los acantilados de esquisto y pizarra originó entrantes y salientes en la roca, pasadizos, “frunas” o grutas y pedazos de roca aislados o unidos a tierra por gigantescos arcos rocosos.
Flora
Inmediatamente por detrás de los acantilados, el espacio es eminentemente agrario salvo pequeñas representaciones de pinar costero. La vegetación original que todavía permanece prácticamente inalterada corresponde a la de los acantilados rocosos y las dunas costeras. Abrigado en pequeños huecos en los acantilados, el perejil de mar, antiguamente empleado para combatir el escorbuto, es utilizado actualmente en gastronomía como complemento de ensaladas. El feo marítimo se localiza consolidando las dunas más expuestas al viento oceánico. Los brezos ocupan preferentemente la parte alta de los acantilados en asociación con gramíneas, tréboles y leguminosas.
Fauna
La mayor parte de la riquísima fauna de la zona se concentra en los humedales de las rías de Foz y, sobre todo, de Ribadeo. Sin embargo, los amplios arenales costeros constituyen un complemento a los humedales de fondo de ría para un buen número de limícolas como chorlitejos, correlimos, zarapitos, agujas, ostreros e incluso aves marinas en paso migratorio como negrones, alcas, alcatraces, etc.